El gran precursor de la Ilustración que acabaría con el Antiguo Régimen tenía veintiún años a la muerte de Luis XI V, el símbolo de ese mismo régimen. El 9 de septiembre de 1715, ocho días después de la muerte del rey, Voltaire fue testigo de las manifestaciones de hostilidad que acompañaron al cortejo fúnebre en el camino de Versalles a Saint-Denis. Allí se enterraba simbólicamente lo que él más despreciaba: el absolutismo, la intolerancia religiosa, la desigualdad en la sociedad...
Sin embargo, Voltaire era consciente de que él sólo había vivido la última parte de ese reinado excepcionalmente largo, y su honradez intelectual no le permitía dejar de ver que allí se enterraba también el Gran Siglo, el glorioso reinado del que él mismo no podía ser sino una de las consecuencias.
De ese impulso por tratar de comprender nació esta obra monumental, empezada a escribir en 1732 y no concluida hasta 1752. Voltaire dedicó más de veinte años en su elaboración. Quien acabaría dando nombre a su propio siglo, «el siglo de Voltaire», necesitaba conocer en profundidad de el siglo de donde venía, «el siglo de Luis XI V», como el hijo que desea conocer cabalmente la vida de su padre para conocerse mejor a sí mismo.
Ficha técnica
Editorial: Biblok Book Export
ISBN: 9788494512001
Idioma: Castellano
Número de páginas: 589
Tiempo de lectura:
14h 6m
Fecha de lanzamiento: 12/04/2016
Año de edición: 2016
Plaza de edición: España
Especificaciones del producto
Escrito por François-Marie Voltaire
Nació el 21 de noviembre de 1694 en París. Su carácter polémico le hizo ingresar hasta en dos ocasiones en la prisión de la Bastilla. Le liberaron tras su promesa de abandonar Francia. Vivió durante dos años en la capital inglesa y regresó. Una nueva critica a las instituciones políticas y eclesiásticas francesas hizo que tuviera que dejar nuevamente la ciudad. Se refugió en el Château de Cirey, en el ducado independiente de Lorena aunque viajó frecuentemente a París y Versalles. Fue nombrado historiador de Francia y más tarde caballero de la Cámara Real. En 1746, le eligieron miembro de la Academia Francesa. En 1758 se establece en Ferney, donde pasó el resto de su vida. Falleció el 30 de mayo de 1778.