Desde tiempos muy antiguos, el mundo oriental tiene unos lugares comunes donde los hombres con inquietudes espirituales realizan viajes, peregrinaciones,...claves en su trayectoria personal."La senda
Entraba radiante el sol por los balcones tiñendo de amarillonaranja los objetos que iluminaban tu exigua figura reflejada por la luna. Los pasos hacían tambalear el suelo de madera. El espejo devolvía tu imagen flotante y eterea que te hacia vislumbrar el futuro. Ahora, al evocarte, solo contemplo, titubeantes, imagenes que se fueron; y la angustia atenaza el corazon al no poder acariciar sus rostros.