La lectura no siempre se practica con un texto enfrente. Vivimos inmersos en un mundo de lenguajes que nos llaman y que exigen ser leídos, pues todo se transforma en una posibilidad de lectura si tomamos conciencia de ello. Muchas personas, sostiene Rodolfo Castro, son grandes lectoras aunque jamas hayan abierto un libro, pero las estadisticas las ignoran y la sociedad letrada menosprecia sus formas de leer. Asi como la cultura evoluciono hacia los libros, la lectura evoluciona hacia el ser humano; para fomentarla debe, pues, ponerse el acento en lo humano. Cuando se pretende imponer los libros sobre las otras lecturas posibles al grado de cancelarlas, no se les hace ningun favor a las letras. Suponer que un libro puede reemplazar la vivencia directa es como creer que la descripcion de una manzana nos quitara el hambre. Las otras lecturas conducen a los libros, y nadie sera un lector pleno mientras no se permita leer, ademas de libros, el lenguaje del arte, la ciencia, la musica, el juego.Convocados por el autor de La intuicion de leer, la intencion de narrar, una dramaturga, un cientifico, un musico, un cirquero, un director teatral, un poeta, una cuentacuentos y una titiritera nos hacen participes de su peculiar manera de leer la vida, no en los libros, sino a traves de sus oficios y profesiones, e invitan a dirigir los sentidos hacia ese lugar, fuera de las paginas de un libro, donde se encuentra el verdadero continuara... Esta obra se enorgullece de su dispersion y de plantear un incompleto panorama de lo que propone. Queda en manos del lector enriquecer estas lecturas sumandoles esa otra que es la suya propia.
FONDO DE CULTURA ECONOMICA DE ESPAÑA, S.L. 9789681674427
Liborio tiene agua de mar en las venas. A veces sus fantasías son cavernas donde se esconden los monstruos más temidos. Otras veces, chapotea de alegría haciendo figuras con la arena húmeda de sus pensamientos. El dice que no quiere ser bueno ni malo, que es mejor ser como el mar... inesperado.
La lectura trasciende los libros. Es más una actitud ante el mundo que una aptitud ante los signos del lenguaje escrito. En esta obra, el maestro, actor y cuentacuentos Rodolfo Castro sostiene una animada plática acerca del aprendizaje, la lectura y la narración oral. Dirigida a quienes busquen entablar una relación menos solemne y acartonada con los libros y la literatura, esta obra es simultáneamente una innovadora propuesta para fomentar en chicos y grandes el gusto por la lectura, un conjunto de antidogmáticos apuntes para narradores orales y cuentacuentos, una reflexión sobre las deficiencias de los sistemas escolares imperantes, y sobre todo una invitación a percibir el mundo con todos los sentidos, a leer la vida además de los libros y hacerle caso a la intuición: la de leer, la de narrar, la de vivir.