📱 eBook INVESTIGACIÓN APLICADA A LA INNOVACIÓN EN EL CONTEXTO EDUCATIVO.

Imaginar escenarios futuros en el momento histórico actual, con las diversas guerras que caracterizan a Europa y al Mediterráneo, una pandemia que acaba de pasar, parece de lo más difícil. Los factores tecnológicos, culturales, sociales, económicos y humanos en juego son terriblemente complejos, ambivalentes y variados (Stengers, 2020). Las dificultades son aún mayores si estos escenarios deben ser además «sostenibles» (ecológicos, solidarios, interculturales, etc.), mientras el mundo parece ir en una dirección completamente diferente. No obstante, eso de imaginar, prefigurar, construir visiones, planificar es una de las características más interesantes de nuestra especie, aunque hay que tener en cuenta, como dice Morin (2005), que nuestra especie es sapiens-demens, por lo que no podemos descartar el peligro de crear visiones erróneas o incluso delirantes. Aclarar su propio punto de vista, sus propios mitos, preferencias y motivaciones de comportamiento y, por tanto, qué tipo de sociedad desear es -como sostiene Mary Douglas (2000)- una condición previa fundamental para modificar y mejorar esos comportamientos y puntos de vista. Teniendo en cuenta que nuestro imaginario es, obviamente, el resultado de una combinación de factores: nuestro grado de conocimiento e inclinaciones culturales, las relaciones sociales y económicas que mantenemos, el papel de los medios de comunicación en la transmisión/construcción de hechos e ideas científicas y no científicas.