¡Feliz Vida! nos plantea la vida como un juego de pistas cuyo objetivo es que manifestemos nuestra esencia a través de las relaciones y actividades que emprendamos en este mundo. La vida nos lleva a ello. Nosotros no tenemos más que creerlo, estar a la escucha y seguir las reglas. La energía necesaria hará su aparición. Y el resto, o sea, el cómo, cuando y dónde, irá apareciendo en su momento entre las pistas.