Esta obra preconiza un cambio trascendental en el papel del paciente psiquiátrico, que aparece como un participante activo y no como un objeto pasivo e irracional. El metodo terapeutico propuesto se fundamenta en un trio de exigencias: actividad, libertad y responsabilidad, jugando un importante papel la comunicacion de los enfermos entre si y con el personal que los asiste. La exposicion no se limita a la rica experiencia de CLARK, adquirida en su larga dedicacion al tratamiento del enfermo mental en centros psiquiatricos, sino que presenta una completa historia de esta asistencia, desde el "tratamiento moral" de finales del XIX hasta la aparicion de la antipsiquiatria, lo que le confiere un caracter de documento excepcional. Su lectura resultara de gran interes para estudiantes de psiquiatria, asistentes sociales y todas las personas vinculadas con el enfermo mental.