La ciudad, con el que Diego Jesús Jiménez obtuvo el premio Adonais de 1964, es un libro innovador, hasta cierto punto insólito, que, 50 años después de su publicación, mantiene plena vigencia. El paso del tiempo no solo no ha atenuado sus calidades, sino que las ha intensificado. Es un libro vivo que gana en cada nueva lectura. Un poemario no ajeno a las conquistas de la mejor poesia en castellano de la primera mitad del siglo XX: en el hay despuntes surrealistas, hay carga meditativa, hay una peculiar mistica laica y una dimension universal de la experiencia ciudadana del poeta (Priego, Madrid, Cuenca), ceñida no solo a lo vivido, sino al propio acto creador. Es, ademas, un libro de la memoria: personal y colectiva.
Esta nueva traducción de las Iluminaciones de Arthur Rimbaud realizada por Juan Abeleira supone un paso decisivo para el acercamiento de los lectores en lengua española a la obra del gran "vidente" de la lirica moderna. Años de dedicacion a este autor y al estudio de la bibliografia mas reciente sobre el poeta frances, con aportaciones decisivas para la aproximacion a su obra, han permitido al traductor depurar al maximo sus versiones, eliminando los numerosos deslices y errores de cuantas les han precedido, y establecer un texto castellano con exactitud y precision, dejando al lector enfrentado con los misterios y las riquezas de la escritura rimbaudiana; una labor que solo las mas recientes investigaciones de criticos y estudiosos han hecho posible.
Desde mediados de los sesenta la obra poética de Diego Jesús Jiménez viene ahondando a conciencia en su propia razón de ser ética y estética; inclasificable por inconfundible, heterodoxa donde las haya, extrema y siempre al margen del irracionalismo neoclasico, del culturalismo escapista y del naturalismo postmoderno, los tres decretos generacionales de estilo con que la critica hegemonica ortodoxa ha ido sucesivamente anonadando la poesia española a lo largo de la baja postguerra, la transicion y el tardofranquismo. Escrito a partir de 1990, Intinerario para naufragos disecciona, de una parte, mediante una incandescente diccion surrealista, el desastre real de esta epoca despiadada presidida por la soledad, la mentira, el miedo y la muerte. Partiendo de la base de que la poesia es antipicipacion sensible de lo real autentico, esto es: conocimiento emocionado de aquello que solo puede ser aprehendido por medio de esa otra razon fundada por el arte, Intinerario para naufragos escruta, por lo demas, la materia prismatica con que el lenguaje cobra cuerpo, la acida experiencia que encarna la literatura y el vacio problematico que el poema abre ante el lector, responsable ultimo, en fin, de cargarlo de sentido y completar vitalmente su silencio inconcluso.
En Fiesta en la oscuridad, publicado en 1976 y hasta ahora imposible de encontrar en librerías, Diego Jesús Jiménez sienta las bases de su poesía visionaria y meditativa de madurez. Es un acercamiento casi telurico a la vida. Tanto a sus aspectos mas gozosos como a sus zonas mas oscuras, inquietantes y contradictorias. A la experiencia visible y a la experiencia del arte o del sueño. Al refugio de la intimidad y a la intemperie de lo colectivo. Tal y como afirmo Luis Suñen tras su aparicion hace treinta años, Fiesta en la oscuridad es un libro total. Algo asi como el deseo por crear una expresion en la que se fundan todas las condiciones a cada componente del poema.
Los libros que componen este volumen son una muestra viva de que tras la Generación del 50 no todo fue estética "novísima". D.J. Jiménez es una de las voces más personales de la poesía en castellano