Los jardines japoneses realizados con grava y piedras, según el estilo karesansui, han fascinado desde siempre a la cultura occidental. Vinculados a la corriente zen del budismo, estos jardines se proyectaron como herramientas para la meditacion, para ser observados de forma estatica; por lo tanto, plantean una relacion con la naturaleza mediatizada por los objetivos espirituales que se les ha asignado. Hoy en dia, esta base filosofica y su popularizada estetica mantienen una condicion enigmatica en Occidente. El autor, François Berthier, toma el famoso jardin del templo de Ryoanji como centro de su discurso y nos ofrece una explicacion detallada de los aspectos filosoficos y proyectuales de los jardines zen, al igual que de la relacion con su contexto historico, social y artistico.