JUAN JOSE MARDONES

Vivir la televisión es la historia fiel y vivida de Televisión Española, la televisión de todos. Historia de sus modestos comienzos, de su gloriosa madurez, de su gran aventura en imágenes, jalonada de ilusiones, obstaculos, exitos y tambien, si, naufragios... La television, jardin secreto para unos, paisaje desvelado para otros, y siempre territorio calido para todos. Un libro que aporta datos, fechas, protagonistas, galerias interiores, y un sincero y ameno anecdotario vivido dia a dia y con apasionamiento por quien lo escribe, por quien nos lo cuenta. Biografia tambien, libro de memorias, pues entre anecdotas, aventuras y trabajo, vemos como va fraguandose una vida, entretejiendose un caminar, el del autor, a quien se vislumbra siempre a retazos, unas veces subiendo sugerente a primer plano, y otras solapandose modesto detras de los aconteceres y de los protagonistas mas ilustres. Protagonistas de los que ya conocemos sus rostros, sus voces, sus nombres, y su historia, y que ahora evocaremos mezclandose tambien con nuestra propia vida de la mano del autor, Juan Jose Mardones, con ritmo y con matices, con sinceridad, emocion y color.

El hallazgo de una vieja entrada del último partido que vieron juntos, las medias rojiblancas que de niño le hubieran convertido en el mejor portero del mundo, el rellano de la escalera transformado en la mismisima Catedral, el profundo dolor por la retirada de Zarra, su primer idolo. Este libro es una hermosa historia de amor, amor en estado puro, amor incondicional a un historico de nuestro futbol, el Athletic Club de Bilbao. A partir de vivencias personales, y apoyandose en un riguroso trabajo documental, Jua Jose Mardones nos conduce con extraordinaria sensibilidad por los vericuetos de esta particular devocion: entrañables anecdotas, anhelos no siempre satisfechos, recompensas inesperadas, momentos dulces y tambien amargos como seguido de un equipo tan singular.

«Los relatos que componen este libro fueron escritos a lo largo de veinticinco años en lugares y circunstancias muy distintos... El soplo que les infundió la vida proviene de la emoción, de una fuerz