JULIO MERINO

El otro Franco. El Franco intelectual y el Franco de la República no es un libro ni a favor ni en contra de Franco. Es el trabajo más serio y más imparcial que se ha hecho sobre Franco, o mejor dicho de las dos facetas mas desconocidas del "personaje" Franco. Porque en esta obra no se habla del Franco Caudillo de España, ni del Generalisimo Franco, ni del jefe de Estado que fue desde 1939 hasta 1975... se habla del Franco que asombro a propios y extraños en la guerra de Marruecos, del "general mas joven de Europa" y del Franco que salvo a la Republica en 1934, 1935 y 1936. Pero, por encima de su situacion militar, el autor ha dedicado especial atencion al Franco mas desconocido: el Franco intelectual, el Franco que se paso sus primeros cuarenta leyendo y estudiando y se hizo amigo de los intelectuales y escritores de su tiempo.

El autor, Julio Merino, dudó si poner su nombre en la portada, como se dice en el prólogo. El 14 de abril de 1931 cayó la Monarquía y se proclamó la II República. Fue un cambio de régimen� sorprenden

En realidad no es un libro, sino la trascripción literal de unas páginas del Diario de Sesiones de las Cortes españolas que son parte de la historia de España. Hasta el punto que el autor, Julio Merino, dudo si poner su nombre en la portada, como se dice en el prologo. El 14 de abril de 1931 cayo la Monarquia y se proclamo la II Republica. Fue un cambio de regimen sorpresa y sorprendente por varias razones: una porque ni los propios republicanos se lo esperaban, dos porque el resultado cuantitativo de las urnas en las elecciones del dia 12 fue favorable a los monarquicos, y tres porque el Ejercito y especialmente la Guardia Civil aceptaron de inmediato la Republica. Muchas y muy rapidas fueron las medidas que el Gobierno Provisional, presidido por Niceto Alcala-Zamora, adopto para acabar con los restos de la Monarquia y poner los cimientos del nuevo regimen. Pero, quizas, una de las cosas que mas llamaron la atencion en aquel verano otoño de 1931 fue la decision urgente y terminante de condenar al Rey Don Alfonso XIII. Y ello sucedio y se aprobo por unanimidad de las Cortes la noche madrugada del dia 19-20 de noviembre de 1931. Porque al finalizar el Pleno Extraordinario, pasadas las 3.30 de la madrugada, los señores diputados acordaron declarar al Rey Don Alfonso Traidor a la Patria y Fuera de la Ley , a el y a su descendencia, y alli estaban Alcala-Zamora, Azaña, Largo Caballero, Indalecio Prieto, Alejandro Lerroux, Julian Besteiro, Martinez Barrio, Gil Robles e intelectuales como Ortega y Gasset, Unamuno y Salvador de Madariaga. De esto trata este libro, de aquella decision de las Cortes Constituyentes de la Republica sobre la que, en seguida, cayo como una losa de silencio. Quizas porque todos se avergonzaron de lo que habian hecho contra un hombre bueno y español por encima de todos como lo era Don Alfonso XIII.

EL OTRO FRANCO. El Franco intelectual y el Franco de la República no es un libro ni a favor ni en contra de Franco. Es el trabajo más serio y más imparcial que se ha hecho sobre Franco, o mejor dicho de las dos facetas mas desconocidas del personaje Franco. Porque en esta obra no se habla del Franco Caudillo de España, ni del Generalisimo Franco, ni del jefe de Estado que fue desde 1939 hasta 1975 se habla del Franco que asombro a propios y extraños en la Guerra de Marruecos, del general mas joven de Europa (que lo fue en 1926) y del Franco que salvo a la Republica en 1934, 1935 y 1936. Pero, por encima de su situacion militar, el autor ha dedicado especial atencion al Franco mas desconocido: el Franco intelectual, el Franco que se paso sus primeros cuarenta años leyendo y estudiando y se hizo amigo de los intelectuales y escritores de su tiempo. Por estas paginas pasan los nombres de Galdos, Unamuno, Ganivet, Valle-Inclan, Ortega, Benavente, los Machado, Maeztu, Peman, Manuel Aznar, del intelectual Azaña, Marañon, en un primer intento de sacar a la luz una cara de Franco hasta ahora inedita. Quizas porque el Franco que ha pasado a la historia ha sido el de los casi cuarenta años de Caudillo y el de los miles de aplaudidores y ahora el de sus miles de detractores.

«Julio Merino vivió la Transición en la butaca de primera fila y a veces entre las bambalinas del teatro. En 1969, cuando Franco designa a Juan Carlos sucesor a título de Rey, ya estaba de subdirecto

En el Juicio Militar contra los implicados directamente en el «23-F», el teniente coronel Tejero Molina se hizo e hizo a España entera una pregunta que sorprendió a propios y a extraños. Fue como res