La aventura del libro está narrada desde la voz lírica del propio Ernest Shackleton, célebre explorador del Polo Sur, a partir de un poético cuaderno de bitácora apócrifo. Mateo Rello cuenta con varios recursos para no naufragar en el intento. Por un lado, tiene mucha experiencia escribiendo bajo la personalidad de heterónimos del más variado pelaje [...] Esto habilita a su yo lírico para manejar gran cantidad de registros poéticos que, en el caso de Meridional asombro, le permiten fluir sin estridencias entre la lírica casi clandestina de la alegoría sentimental y la épica de los grandes espacios del Sur salvaje (y del periplo por ellos), dibujando un personaje razonablemente contradictorio y sorprendentemente rico.
De magos y mineros (Una historia de Plutón) da respuesta práctica a un viejo dilema literario y ético: ¿puede la poesía abordar la denuncia social sin descuidar la exigencia estética sobre su artefacto expresivo, el poema? ¿La urgencia justifica un mal poema, que nadie ha pedido? Con un lenguaje complejo e imaginativo, y desde un profundo compromiso con la verdad, este libro nos pone ante los ojos una impugnacion general al discurso oficial de la democracia y plantea otra pregunta acuciante: ¿es realmente civilizada una sociedad en la que convivimos con personas que viven de la basura o no existen legalmente porque no tienen papeles? En efecto, los protagonistas de la obra son todos los desahuciados que viven relegados a la invisibilidad social, pero tambien esa parte nuestra que, por complicidad, escarba en otras basuras. La ciudad, como suele ocurrir en la obra de Mateo Rello, es la otra protagonista de De magos y mineros: de Barcelona a Estambul, es el caldero fascinante y abigarrado en el que nos debatimos.