Existen muchos parajes olvidados en la tierra abulense. Mientras en épocas remotas, lugares como la Yerma sirvieron a los moradores de estas tierras como centros religiosos, paso de ganado o descanso de caminantes, con el transcurso de los siglos su memoria historica se desvanece.La Yerma nos ofrece un viaje atras en el tiempo. Desde los celtas hasta la posada medieval, desde los ritos de adivinacion prehistoricos hasta el rustico molino situado a las orillas del arroyo. Se pretende una aportacion historica del lugar, a traves de la interpretacion de lo siempre visto y nunca hallado.