REBELION EN LA IGLESIA

En la Iglesia -santa, católica, apostólica y romana, por más señas- , es fácilmente constatable la veracidad del título “REBELIÓN EN LA IGLESIA (tras los pasos del Papa Francisco”, nuevo libro de Antonio Aradillas. Tal diagnóstico es compartido así mismo por quienes contemplan el panorama al margen de motivaciones cristianas y religiosas en general. Es notable tal rebelión, y los grados de notoriedad e importancia dependen de circunstancias diversas, al igual que la calificación, que hasta llega a veces a incluir el término “cisma”.Huelga referir que el causante de la rebelión –“¡oh felix culpa¡”-, no es otro que el Papa Francisco. “¡ Elimínalo, o ilumínalo¡”, es fórmula de oración “piadosa” consagrada con cierta y consentida “oficialidad”, por personas, colectivos, movimientos y grupos “cristianos de toda la vida” en disconformidad radical con el comportamiento pastoral que encarna el nuevo Obispo de Roma. Por supuesto, que no son precisamente laicos los redactores de la citada oración, sino que en la misma, y en su difusión, intervienen miembros de la jerarquía, pudiendo asegurar, desde mi propia experiencia, que el término “impresentable” aplicado al “Santo Padre”, “Vicario de Cristo” o “Vice-Dios”, -de quienes Francisco es sucesor-, es la penúltima adquisición y “piropo” inscrito en la letanía.La rebelión protagonizada por el Papa Francisco en la Iglesia es el tema- eje del libro, que no es un tratado teológico, pastoral y menos canónico. Pero es evangélico, es decir, periodístico, dado que la vida, por vida, fue el marco real del adoctrinamiento y testimonio del mensaje que Cristo Jesús pretendió perpetuar en la Iglesia. La historia –toda historia- es siempre sagrada.