Sinopsis de LA CUIDAD DE DIOS (1º) OBRAS COMPLETAS XVI
La «Ciudad de Dios» es la obra de más aliento, más orgánica y trascendental de la inmensa producción agustiniana. Las «Confesiones», los libros del «De Trinitate» y los «Tratados sobre San Juan» señalan hitos difíciles de superar en la historia de la intimidad religiosa, en la teología trinitaria y en la exégesis bíblica. Pero por sus dimensiones arquitectónicas, su vasta concepción de Dios y del hombre y la amplitud panorámica que abre para el pensamiento y la acción, es «La Ciudad de Dios» la obra más celebrada de San Agustín. Por ella se le reconoce como el creador de la llamada Filosofía de la Historia. En un tiempo como el que vivimos, el mensaje que contiene esta obra cumbre del genio universal de Agustín reviste una particular vigencia y actualidad.
Ficha técnica
Traductor: Santos Santamaría del Río, Fuertes
Editorial: Biblioteca de Autores Cristianos
ISBN: 9788479148799
Idioma: Castellano
Número de páginas: 960
Tiempo de lectura:
23h 4m
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 28/01/2007
Año de edición: 2007
Plaza de edición: Madrid
Número: 171
Peso: 795.0 gr
Especificaciones del producto
Escrito por San Agustín de Hipona
San Agustín, obispo de Hipona (345-430), refleja en su vida y en su obra el cambio del Mundo Antiguo a la cosmovisión cristiana. Tras su conversión al cristianismo, admirablemente descrita en sus Confesiones, fue un incansable buscador de la verdad. Amar, pensar y vivir suponían para él los tres vértices del triángulo de la existencia. San Agustín fue el abanderado de la empatía previa al conocimiento intelectual. Como maestro de vida y sabiduría aconsejó el desapego del bullicioso mundo, con sus fastos, honores y ambiciones como la vía idónea para llegar a ser personas completas. Y el amor universal como la mejor solución de conflictos y la más excelsa de las prácticas. Su notable influencia marcó, además del mundo medieval y el Renacimiento, el pensamiento de autores tan modernos y contemporáneos como Descartes, Rousseau, Kierkegaard, Wittgenstein o Hannah Arendt.