El 36 Quai des Orfebres consigue un nuevo jefe. Nombrado jefe de este grupo de borrachos, de la mala suerte, de homosexuales, escritores y otros cretinos, Anne Capestan, estrella caída del poder judicial, ha entendido que su misión era la de estar en silencio. Pero Viola, que odia obedecer y vender la piel de pollo a la plancha antes de haber arrancado!