UNED. UNIVERSIDAD NACIONAL DE EDUCACION A DISTANCIA 9788436260588
Cien años antes de que los godos se asentaran en Hispania, a comienzos del siglo IV, el emperador de Rávena les encomendó el orden público en las provincias galas al sur del río Loira. Cuando, en los años ochenta del pasado siglo, Ana Maria Jimenez Garnica desperto su interes por este pueblo, se aceptaba que, entonces, los godos habian dado vida a un reino autonomo, casi independiente, que se llamo de Tolosa por analogia con el posterior de Toledo. Este libro plantea una vision renovada, fruto de la relectura exhaustiva de las fuentes antiguas y de la contextualizacion de los godos de Occidente en el mismo marco compartido por otras gentes, que, como ellos, procedian del exterior del Imperio Romano.