Al amanecer del martes 9 de abril de 1940, las fuerzas alemanas invadieron Dinamarca, que se rindio en apenas unas horas, y lanzaron a lo largo de mas de mil kilometros del litoral de Noruega una extraordinaria operacion de armas combinadas la primera en la historia de la guerra y la mayor de las que los alemanes emprendieron durante toda la Segunda Guerra Mundial, para ocupar una serie de enclaves estrategicos.La invasion tuvo lugar ante las mismas narices de la poderosa Royal Navy. Con las tres armas de la Wehrmacht colaborando a traves del OKW, la Operacion Weserubung constituyo un hito importante y la demostracion de que los alemanes habian comprendido mejor las realidades de la nueva guerra moderna desde la Primera Guerra Mundial. Noruega incluyo algunos de los elementos de la guerra alemana que luego se hicieron celebres con la denominacion de Blitzkrieg.Por el contrario, el fracaso britanico en Noruega debilito su posicion como potencia militar, tanto a ojos de los franceses como de Estados Unidos. La campana noruega coincidio con la derrota de Francia en la primavera de 1940 y puso al bando aliado en una peligrosa tesitura. Pero Winston Churchill, que habia sido responsable de algunas de las peores decisiones y errores de la campana al frente del Almirantazgo, no solo sobrevivio politicamente, sino que fue elegido primer ministro. Su determinacion para seguir resistiendo a Hitler en el verano de 1940 constituye uno de los momentos decisivos de la Segunda Guerra Mundial. La personalidad de Churchill definio la vision en el campo aliado durante la primera mitad del conflicto. Este fue, de forma indirecta, el beneficio mas importante que la invasion de Noruega tuvo para el mundo libre.Antonio Munoz hace un profundo analisis a nivel operacional de toda la campana noruega, asi como un riguroso estudio de todas las decisiones politicas de ambos bandos.