En este nuevo ejercicios historiográfico he podido aproximarme, con mayor profundidad y refrendo documental, a todo un periodo de la arquitectura española del XVI, ubicada —de manera casi exclusiva—
Úbeda, la Bétula romana, conoció las dos caras de la sociedad arquetípica de nuestro siglo de oro. El hampa y la mendicidad coexistieron con las clases privilegiadas, que sumaban a su riqueza el afán por un entorno de esplendor artistico. De la mano del arquitecto Andres de Vandelvira, Arsenio Moreno Mendoza transita por esta ciudad de serena belleza mas cercana al entorno de la Toscana que a la de los secos olivares. Ubeda es un claro ejemplo del Renacimiento español y en sus edificios rezuma la historia ya aneja del cuatro siglos pasados. El autor va desgranando leyenda y verdad, refiriendo pasajes literarios y acontecimientos pasados, mientras deambula por plazas e iglesias, adentrandose en patios de casas palaciegas con fachadas platerescas.