China tiene un plan: una combinación de contrato social para proveer de seguridad económica y física a los ciudadanos con un mandato celestial para volver a ser el país más relevante del mundo. Un plan que utiliza la tecnologia para el desarrollo industrial, para dotar de confianza a la sociedad, y para ofrecer a los ciudadanos soluciones con una mezcla inseparable de conveniencia y control. Su mensaje de fondo nos hace preguntarnos: ¿es que no queremos convertirnos en mejores ciudadanos, disfrutar de un entorno mas seguro, vivir en un mundo feliz? Nos asusta -y mucho- que una autocracia demuestre ser mejor que nuestras democracias y nuestro respeto por la sociedad civil y los derechos humanos. Sin embargo, la creciente presencia de China deberia servir para que mejoremos y avancemos. Precisamente, esta monografia intenta explicar desde dentro -desde China- este nuevo plan, el tecno-socialismo combinado con el capitalismo de estado. El analisis se pretende lo mas objetivo posible cuando uno se halla inmerso en un pais y una cultura apasionantes, donde la tradicion y la modernidad se cruzan a cada instante en contradicciones manifiestas, y cuando existe igualmente una compleja lucha de narrativas, las que explican las ventajas de su sistema y su buena voluntad global, y las que aseguran que China es un peligro internacional y ha desatado la carrera armamentistica de las nuevas tecnologias. La realidad es bastante mas compleja, con objetivos sociales y politicos muy alejados de los que estamos habituados. De hecho, esta es la mayor contribucion de la China actual: el pais, su sistema y sus experimentos estan en algun lugar de un futuro posible y deberian servir de punto de referencia para una reflexion sobre el triangulo tecnologia, economia y sociedad que conduzca a un verdadero beneficio para todos.