Es un lugar común negar la posibiliadad de representar el teatro de vanguardia, constituido por unos textos que tendrían mayor vocación literaria que escénica. Sin embargo, Ignacio Sánchez Mejías (1891-1934), famoso torero amigo de los poetas del veintisiete, vio Sinrazon (1928) en el escenario del madrileño Teatro Caldero; Valentin Andres Alvarez (1891-1982) gozo con las 150 representaciones de Tarari (1929) en el tearto Lara; Y Claudio de la Torre (1895-1973) estreno Tic-tac (1930) en el teatro Infanta Isabel.Las tres obras fundamentales del teatro español de vanguardia son editadas en este volumen por la profesora de Universidad de Palermo Floriana Di Gesu, con especial cuidado. la introduccion situara al lector en la vida literaria y, sobre todo, teatral de la epoca, pues pasa revista a todas sus particularidades, y una oportuna notacion a pie de pagina acompaña y aclara los textos.