José Manuel Ballester

De arboris perennis reúne el trabajo de José Manuel Ballester en torno a un tema común: el árbol.Son obras de un proyecto en el que el artista ha trabajado durante diez años y ofrece una mirada atemporal y alegorica sobre la vida.En estos tiempos de crisis ecologica es un homenaje a la belleza de la naturaleza y al arbol como protagonista.Las imagenes estan acompañadas de textos poeticos, una seleccion de haikus y de versos clasicos que reflexionan sobre el vinculo entre el ser humano y la naturaleza.

Catálogo de la exposición organizada en Tabacalera. Espacio Promoción del Arte del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, dedicada a la obra del fotógrafo Jose Manuel Ballester, galardonado con el Premio Nacional de Fotografia 2010. La muestra recopila medio centenar de imagenes realizadas a lo largo de los ultimos ocho años, con el objetivo de acercar al espectador a los diferentes cambios que se han producido en el trabajo del artista, siempre articulado en torno a tres elementos: el t

Umbrales de silencio reúne sesenta y cuatro obras en las que el artista se sumerge, por primera vez, en los recovecos de una ciudad mediana con un rico pasado histórico, para traerlo hasta el present

"El libro ivita a ""vaciar nuestros museos"", tanto los reales como los que cada uno llevamos insertados en nuestra memoria, para plantear nuevos enfoques que sean capaces de abordar tanto nuestro pasado como nuestro futuro. Los recursos visuales empleados por Ballester en estas piezas cambian la posicion del espectador frente al mundo exterior y frente a su propia memoria.La muestra parte de la idea del artista de que ningun museo es capaz de contener entre sus muros la esencia de la cultura. Para Ballester, los museos no son mas que espacios que custodian lo mas representativo que la historia nos ofrece en cada momento. Una historia fragmentada y en la mayoria de los casos, descontextualizada,que nos permite indagar en un pasado borroso y que ciclicamente pasa por revisiones"

Con total respeto a la libertad creativa del fotógrafo, la Fundación María Cristina Masaveu Peterson pone en marcha la segunda edición de «Miradas de Asturias», iniciativa de largo recorrido que prom

El libro contiene 50 fotografías de sus obras másrecientes, concretamente de los últimos cinco años de su trabajo fotográfico, todas ellas inéditas, que muestran la capacidad de la mirada de Ballester para lograr que lo estatico se convierta en eterno, eliminando la percepcion temporal y trabajando con total destreza la dimension espacial.

Este libro de fotografías de José Manuel Ballester sobre los proyectos de Ferrovialrealizados en todo el planeta representa un mapamundi muy diverso que ofreceuna gran información sobre cómo es nuestra civilizacion, sus fundamentos y lacapacidad de intervenir sobre la naturaleza para adaptarla a las necesidadesde nuestra especie. A traves de mas de un centenar de impactantes imagenespanoramicas, que captan una mirada mas alla de los margenes, se descubre elingenio de ser humano en su afan innovador y la belleza que entraña el trabajocolectivo frente al individuo.

Entre la ficción y la realidad" invita a pasear el artista y Premio Nacional de Fotografía José Manuel Ballester en la Sala Verónicas, donde se exhiben 14 fotografías intervenidas por el propio creador, alguna de ellas pensadas especialmente para este espacio. Sugestivo y misterioso, bajo la influencia de la pintura renacentista italiana y seducido por lo que esconde la arquitectura, Ballester sumerge al visitante en unos espacios familiares pero también desconocidos, renovados, únicos. Con esta nueva exposición, este espacio singular marcado por los ecos del antiguo convento del siglo XVIII continúa afianzándose como un referente dentro del arte contemporáneo. Edición bilingüe inglés-castellano.

Exposición antológica de la obra de los doce últimos años del pintor y fotógrafo José Manuel Ballester, que incluyó óleos y fotografías en los que la arquitectura, y en concreto el espacio interior, es el tema principal. Para ello el artista escogió espacios anónimos, vacíos de personas y enseres, bañados por una luz tibia y uniforme, como proveniente de tubos fluorescentes

Con la iconografía del extremeño en mente, Ballester aceptó la invitación de la Fundación Ortega Muñoz y, lanzado a recorrer parecidos caminos y contemplar semejantes territorios, tan sólo impregnado con el espiritu del pintor, ha mirado el territorio y ha sentido una emocion similar. El resultado es una sorprendente cercania entre las pinturas de uno y las fotografias del otro. No es que esos paisajes de viñedos, trigales u olivares no hayan cambiado en exceso durante las ultimas decadas, pues si lo han hecho, aunque de manera muy sutil debido a la industrializacion de la agricultura, sino que el motivo de la aproximacion entre las obras de ambos artistas es el haber actuado con una semejante sensibilidad y desde compartidas posiciones de devocion y respeto hacia la naturaleza.Ambos son dos artistas modernos, cada uno a su manera y en su momento. Ballester tiene ese credito unanimemente reconocido y Ortega Muñoz lo tuvo en su momento, gracias a su acusada conviccion y peculiaridad estilistica, cuando lo facil hubiese sido renunciar a sus convicciones para sumarse a las convenciones de lo fugaz y lo decorativo. La Fundacion Ortega Muñoz viene desarrollando desde hace ya casi dos decadas una importante labor en torno al pintor nacido en San Vicente de Alcantara destinada a poner en valor la obra artistica de Godofredo Ortega Muñoz mediante el estudio y la catalogacion de su corpus pictorico.Un esmerado trabajo encaminado a establecer un dialogo con otros artistas de su tiempo y/o actuales, a fin de entender la estrecha relacion que mantiene su particular vision del mundo con el espiritu de nuestro tiempo.Dado el caracter fundamentalmente paisajistico de las pinturas realizadas durante las ultimas tres decadas de su vida, es pertinente ofrecer, desde una perspectiva actual, diferentes aproximaciones humanisticas a la naturaleza, en particular, la extremeña, por medio de publicaciones poeticas, historicas y ensayisticas.

Este viaje arranca con la presencia de José Manuel Ballester recorriendo la Norman Foster Foundation con su cámara, su trípode y su equipo siempre en movimiento. Quizás haya un patrón subyacente en sus movimientos, pero no somos capaces de discernirlo vi