Este trabajo viene a llenar un vacío de la homeopatía en este campo en el que no abundan los textos sobre los resultados en animales. El libro es de fácil lectura y sumamente ameno porque expresa la vivencia del animal, desde una comprension empatica que resulta muy grafica y reveladora, a la vez que sumamente divertida en algunos casos. Es un recorrido practico por la materia medica que resulta asi muy ilustrativa desde la optica veterinaria, ya que muestra los sintomas en su expresion mas genuina. El perro que es avaricioso recolecta las cosas, junta la comida y no disfruta de nada, simplemente lo guarda y lo preserva. Si es limpio y meticuloso no se mancha de manera habitual y es capaz de comer de manera ordenada y sin tirar nada alrededor. De este modo su vivencia es evidente, solo hay que saber percibirla y conocer la materia medica para encontrar el medicamento adecuado a su desequilibrio vital. El libro esta dirigido a veterinarios, pero es tambien adecuado para medicos que quieran hacer un repaso divertido por esta materia medica ejemplificada con casos clinicos. A traves de ellos podemos sentirnos un poco mas cerca de ese mundo animal que situamos en una escala inferior y al que dominamos y hasta incluso maltratamos. Si fueramos capaces de experimentar y sentir nuestra propia naturaleza con toda la fuerza, es seguro que nos relacionariamos de otro modo con el misterio que encierra toda forma de vida, en este caso, las criaturas mas proximas a nosotros y con las que incluso compartimos parte de nuestra vida.
Cuando hablamos de homeopatía siempre hacemos referencia a su aplicación en humanos, sin embargo, la veterinaria es un campo sumamente interesante para esta medicina por varias razones. En primer lugar el animal expresa su sufrimiento de forma más pura, sin racionalizar ni justificar lo que le ocurre, al igual que los niños, muestra emociones y las reacciones ante lo que vive sin disimulo.
Cuando hablamos de homeopatía siempre hacemos referencia a su aplicación en humanos, sin embargo, la veterinaria es un campo sumamente interesante para esta medicina por varias razones. En primer lugar el animal expresa su sufrimiento de forma más pura, sin racionalizar ni justificar lo que le ocurre, al igual que los niños, muestra emociones y las reacciones ante lo que vive sin disimulo.