Ester Razé nos propone un libro que se mueve entre los territorios de la literatura y la ciencia. Ciencia problemática para algunos, quizás para todos, en la medida en que no se adapta a los estándares del uso, pero, por eso mismo, especialmente propicia altratamiento literario. Lo que la razon no es capaz de pensar lo sueña la poesia. En todo caso ese sueño da cuenta de la necesidad de lo soñado, de su ultima realidad mas alla y ¿quien sabe? de la veracidad. Esa realidad que Carl Gustav Jung denomino psiquica para distinguirla, pero sin complejo alguno de la realidad fisica. Por otra parte, ¿sabe alguien, cabalmente, si fisico y psiquico son algo mas que terminos a los que acudimos en busca de ayuda? Este libro salta mas de una barrera. De forma explicita la que los farmacologos, en otro contexto, denominan barrera placentaria. La placenta, no lo olvidemos, da de si el cordon umbilical, y este elemento es un nexo poderoso, quiza tanto como compartir ese dialogo con el psiquismo fetal propuesto poeticamente por la autora. Un dialogo que es capaz de remontarse a las generaciones precedentes. Una forma de hablar, de comunicarse, que busca, e incluso encuentra, una especie de paraiso perdido. Pues, ¿Que otra cosa que un paraiso perdido es el espacio de las palabras nunca dichas a quienes ya no estan asi como a quienes aun no estan?
Con este trabajo María Ester Razé de Gascón trata de mostrar a sus lectores, profesionales del área o simplemente a lectores interesados en el tema? , sus vicisitudes para conseguir superar una tesis doctoral. A sus setenta y cuatro años, superando la prueba con aliento, fuerza y motivacion, pone este trabajo para ampliar conocimientos sobre una enfermedad, sin lugar a dudas, psicosomatica y de gran actualidad.