Existe en la temprana infancia un período en que somos inocentes, puros, felices, radiantes. Una situación extática de dicha y de gracia. La pérdida de esa inocencia representa la salida de la unidad, la construcción de la primera barrera: la que separa el yo del no yo -la piel-, lo extraño frente a mí, la controversia desgarradora entre un mundo de conflictos y la indefensión del ser separado y solo.
El nuevo paradigma psicológico se cimenta en grandes investigadores del alma humana como lo son A. Maslow, Carl Jung, Ken Wilber y Stanislav Grof, quienes diseñaron el marco teórico de esta psicologí
El Eneagrama es un camino. Un camino hacía la luz, hacia la verdad que todos necesitamos vislumbrar para completarnos. En realidad, son nueve caminos, que confluyen en uno, al que podríamos llamar amor. Uno de ellos es el camino propio de cada individuo, del que tanto hablan los maestros espirituales de todos los tiempos. El "camino del corazón", de Carlos Castaneda. Además del propio, a cada uno de nosotros se nos señalan ocho rumbos, para contemplar la cara de Dios. El Eneagra nos invita a desarrollar los dones de los cuales hemos sido dotados los seres humanos. En un juego de luces y sombras, nos provee de los medios para reconocer nuestros propios atributos, oscuros y luminosos, y redimirlos hacia la luz, hacia la conciencia pura. Vale la pena intentarlo.