De Norte a Sur y de Este a Oeste, en todos los rincones del planeta se cuentan historias de fantasmas que han regresado de entre los muertos para reclamar justicia y el descanso de su alma. Otros, por el contrario, solo quieren divertirse, o incluso proteger a un ser querido. Pero todos ellos resultan tan reales que erizan el vello y ponen en alerta a aquellos que los perciben.
Gigante o giganta, el ogro está ahí, como una montaña de fuerza bruta que suscita terror. Mientras que el hada protege, el ogro y la ogresa amedrentan y nos dejan de piedra. Es cierto que estos monstruos tienen forma humana, pero no por ello resultan menos espantosos. Afortunadamente, el ogro suele ser tan estupido como codicioso. Pero saber que engulle todo lo que se mueve ¡Es como para echarse a temblar!