La lucha fratricida que partió las vidas de nuestros antepasados entre 1936 y 1939, comenzó
como un golpe de Estado más, otro de tantos los que salpicaron la España del siglo XIX, pero
que enseguida adquirió la tremenda factura de una guerra.
No fueron ajenos a ello los factores internacionales y la colaboración exterior que hizo que el
alzamiento franquista se distinguiera de los anteriores: la ayuda italiana y alemana al bando
nacional y el auxilio de las Brigadas Internacionales y la URSS al Gobierno legal. Esta injerencia
externa influyó decisivamente en el desarrollo del conflicto y en su desenlace; entre otros
factores porque fue aquí, sobre suelo español o en sus cielos, donde se ensayaron tácticas y
técnicas de combate, cañones, fusiles, vehículos acorazados, aviones, estrategias políticas y de
propaganda que protagonizarían la Segunda Guerra Mundial.
De golpe, España adquiría relevancia en el foro internacional y figuraban en el mapa lugares
tan desconocidos como Brunete, donde tuvo lugar el choque más encarnizado de toda la
guerra; el Jarama, la batalla clave para el asedio de Madrid, o el Ebro, el enfrentamiento más
largo y sangriento de la guerra y el definitivo canto del cisne de la España republicana.
En esta obra, escrito por grandes expertos en la materia, el lector revivirá cada uno de los
enfrentamientos decisivos de la contienda y podrá comprender el peso específico que tuvieron
en el fracaso y la victoria de unos y otros y el laboratorio ensayístico que supusieron a la
Segunda Guerra Mundial