La narrativa y la poesía se unen, a través de la pluma de Tomás Layel, en este canto de amor a la naturaleza, en todo su esplendor, y a la humanidad, incluso en sus más desafortunados aspectos. La amistad, la soledad, el perdón, el cariño y la fidelidad son algunos de los muchos sentimientos plasmados en cada página de esta obra. "