Sinopsis de SOBRE LA NATURALEZA DE LA PALABRA Y OTROS ENSAYOS
Nacido en Varsovia, de ascendencia judía y probable conversión cristiana, estudiante en París, Heidelberg y San Petersburgo, poseedor de una exquisita cultura y dinamizador del movimiento acmeísta, el poeta ruso Osip Mandelstam (1891-1938) no tardó en manifestar su disidencia hacia los cánones estéticos y políticos de una revolución que había despertado inicialmente sus simpatías. La biografía de Mandelstam –cuyo dramático desenlace es inseparable de la fe del poeta en la palabra– tiene como telón de fondo una circunstancia histórica en la que pensar por cuenta propia o burlarse de Stalin en unos versos podía acarrear la persecución, el confinamiento y el asesinato. «¿De qué te quejas? –le preguntaba con dolorosa ironía a su esposa–. Éste es el único país que respeta la poesía: matan por ella. En ningún otro lugar ocurre eso». Los siete ensayos de Mandelstam reunidos en este volumen bajo el título del más extenso de ellos ofrecen al lector el lúcido pensamiento de uno de nuestros contemporáneos Esenciales.
Ficha técnica
Traductor: José Casas Risco
Editorial: Ardora Ediciones
ISBN: 9788488020376
Idioma: Castellano
Número de páginas: 128
Tiempo de lectura:
2h 58m
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 01/11/2003
Año de edición: 2003
Plaza de edición: Es
Número: 19
Alto: 17.0 cm
Ancho: 12.0 cm
Peso: 100.0 gr
Especificaciones del producto
Escrito por Óssip Mandelstam
Óssip Mandelstam, la figura més emblemàtica del moviment acmeista, va néixer a Varsòvia el 1891. Amb un bagatge d’estudis literaris molt ampli, es donà a conèixer amb el recull poètic La Pedra, d’èxit immediat. Després de la revolució del 1917, va començar a ser malvist per les noves autoritats, que el veien poc afí al règim; tot i així, va gaudir d’algunes complicitats que li van permetre publicar encara alguns llibres més. Als anys trenta, però, fou directament perseguit, detingut i deportat: de primer, tres anys a Vorónej; després a Sibèria. Morí el 1938 en un camp de pas, just abans d’arribar a Vladivostok. El treball i la memòria de la seva dona, Nadejda, sobretot, han permès la pervivència de la seva poesia.