El Apocalipsis de San Juan es el último libro de la Biblia cristiana. Es también su coronación. En la primera parte (c. 1-3) el Señor resucitado habla a su Iglesia invitándola a la fidelidad con la promesa de la corona de la vida. En la segunda parte (c. 4-22), tras la vision del trono de Dios y la vision del Cordero asistimos al juicio de Dios que comporta el castigo de la humanidad pecadora y la salvacion de los elegidos. La gran vision de la Mujer y del Dragon situada en la mitad de la parte profetica del libro (c. 12), sintetiza la lucha entre el bien y el mal y la victoria del Mesias, hijo de la Mujer. Las Bestias a las que el Dragon entrega su poder son derrotadas (c. 19-20). La vision de los nuevos cielos y de la nueva tierra como asimismo de la Nueva Jerusalen, morada de Dios entre los hombres (c. 21-22), cierra este libro que ha sido llamado Evangelio de la Esperanza.Domingo Muñoz Leon, sacerdote de la Diocesis de Jaen, ha sido profesor de la Facultad de Teologia de Granada y posteriormente Miembro del Consejo Superior de Investigaciones Cientificas en la especialidad de Targum y Nuevo Testamento (1974-1995). Ha sido tambien miembro de la Pontificia Comision Biblica (1984-1995) y profesor invitado de las Facultades de Teologia de Comillas y San Damaso. Es autor de numerosas obras de tematica biblica y ha participado en los trabajos de Edicion de la Biblia de Jerusalen en los escritos joanicos.
El Apocalipsis de San Juan es el último libro de la Biblia cristiana. Es también su coronación. En la primera parte (c. 1-3) el Señor resucitado habla a su Iglesia invitándola a la fidelidad con la promesa de la corona de la vida. En la segunda parte (c. 4-22), tras la visión del trono de Dios y la visión del Cordero asistimos al juicio de Dios que comporta el castigo de la humanidad pecadora y la salvación de los elegidos. La gran visión de la Mujer y del Dragón situada en la mitad de la parte profética del libro (c. 12), sintetiza la lucha entre el bien y el mal y la victoria del Mesías, hijo de la Mujer. Las Bestias a las que el Dragón entrega su poder son derrotadas (c. 19-20). La visión de los nuevos cielos y de la nueva tierra como asimismo de la Nueva Jerusalén, morada de Dios entre los hombres (c. 21-22), cierra este libro que ha sido llamado "Evangelio de la Esperanza".
¿Es posible escribir hoy un comentario después del volumen de R.E. Brown (verdadera enciclopedia) o después de los comentarios de H.-J. Klauck o de M. Morgen con sus exquisitos análisis literarios y su exhaustiva informacion bibliografica? Reconocemos los meritos de estos comentarios y de tantos otros que tienen su justificacion dentro del circulo de estudios especializados. Por ello, no pretendemos sustituirlos. Simplemente intentamos un tipo de comentario que haga llegar al Pueblo de Dios el mensaje del texto biblico como alimento espiritual de los creyentes. Para ello se escribieron las Cartas de Juan y toda la Biblia. El acercamiento especializado resulta muy dificil de digerir para muchos cristianos, incluso ministros de la Palabra. En estas circunstancias, intentar un acercamiento a las Cartas de Juan liberado de la esclavitud de las notas y de continuas referencias bibliograficas puede prestar un servicio a los creyentes.