Enrique Linde Paniagua

Introducción: los instrumentos jurídicos para el estudio y la práctica del derecho administrativo Capítulo I. Los orígenes del derecho administrativo: del derecho del poder al derecho de los ciudada

Este manual está destinado a los alumnos de las asignaturas cuatrimestrales dedicadas al Derecho de la Unión Europea, en los diferentes grados en que la misma se imparte. Siendo el objeto principal de este trabajo el Derecho de la Union vigente en la actualidad.

No hay fuerza capaz de oponerse a la voluntad de un país, fielmente representada y rectamente dirigida. Lo cual podrá conseguirse cuando todos, y especialmente las nuevas generaciones, pongamos el pensamiento alto, en un ideal comun de progreso y bienestar patrios; sintamos hondo el patriotismo trasladando su residencia de los labios al corazon, para que se transforme de ropaje de nuestras ideas en impulso primordial de nuestros actos; y trabajemos recio en la dura tarea de levantar a Espasa de su postracion y preparar el advenimiento de las nuevas generaciones que aprovechen estos trabajos, como nosotros aprovechamos el titanico esfuerzo de nuestros antepasados en defensa de la libertad y del regimen constitucional

El Derecho Administrativo de nuestro tiempo se caracterizará, dice el autor de la obra, por su conversión en un derecho al servicio de los ciudadanos que vaya mas allá de las afirmaciones eufemísticas de los legisladores. No deja de ser curioso que entre las miles de leyes a las que calificamos de legislación administrativa solo unas pocas esten dedicadas de modo principal a los derecho de los ciudadanos. Por eso resulta necesario para el autor que el estudio del derecho administrativo se haga desde los valores, principios y misiones constitucionales que tienen encomendados los poderes públicos y que permitirán reconstruir el edificio administrativo, arrumbando los abundantes restos del Derecho Administrativo que llega hasta nuestros dias como un claro exponente del derecho del poder.

El nacimiento de las constituciones en el mundo contemporáneo está inevitablemente unido al de la democracia. El fenómeno se inicia en España en 1812 y alcanza su plena madurez con la Constitución de 1978. Ha sido un proceso largo, con avances y retrocesos, acordes con el desarrollo politico y social del pais. Sin embargo, gracias a la vigente Constitucion, la participacion de todos los españoles en el futuro politico de España y de la Europa democratica esta asegurada.

La Constitución Española de 1978 se sitúa en la cúspide de la pirámide normativa sobre la que descansa nuestro ordenamiento jurídico. De ahí que, aunque la mayor parte de los títulos de esta Biblioteca recogen nuestra mas Alta Norma, resulta coherente, util e incluso imprescindible disponer en la coleccion de un libro, manejable al maximo, que permita en cualquier momento consultar la Constitucion, profusamente anotada y comentada en todos sus preceptos.La incorporacion de la Ley Organica del Tribunal Constitucional obedece a dos razones: en primer lugar, a que el Tribunal Constitucional es el interprete supremo de la Constitucion, siendo por tanto logico, a fin de que el profesional y el estudiante dispongan de los instrumentos basicos de la constitucionalidad española, que figure la Ley reguladora del Alto Tribunal de Garantias; y, en segundo lugar, el trascendental significado que dicha Ley encierra en si misma. En esta edicion se incorporan todas las modificaciones sufridas por el texto primitivo de la Ley Organica del Tribunal Constitucional. Finalmente este volumen se completa con un indice analitico tanto de la Constitucion como de la Ley Organica del Tribunal Constitucional.La Constitucion española de 1978 incrementa su prestigio con el transcurso de los años. Es una

La Constitución Española de 1978 se sitúa en la cúspide de la pirámide normativa sobre la que descansa nuestro ordenamiento jurídico. De ahí que, aunque la mayor parte de los títulos de esta Biblioteca recogen nuestra mas Alta Norma, resulta coherente, util e incluso imprescindible disponer en la coleccion de un libro, manejable al maximo, que permita en cualquier momento consultar la Constitucion, profusamente anotada y comentada en todos sus preceptos.La incorporacion de la Ley Organica del Tribunal Constitucional obedece a dos razones: en primer lugar, a que el Tribunal Constitucional es el interprete supremo de la Constitucion, siendo por tanto logico, a fin de que el profesional y el estudiante dispongan de los instrumentos basicos de la constitucionalidad española, que figure la Ley reguladora del Alto Tribunal de Garantias; y, en segundo lugar, el trascendental significado que dicha Ley encierra en si misma.El volumen, por consiguiente, esta orientado hacia la via de la constitucionalidad, finalidad que se alcanza mediante la incorporacion de un exhaustivo registro de la jurisprudencia del Tribunal Constitucional, subdividido en tres indices:Cronologico.Concordado con los articulos de la Constitucion, y de Materias.Completa el volumen un extenso indice analitico general, que remite tanto a los articulos de la Constitucion cuanto a los de la Ley Organica del Tribunal Constitucional.

La Constitución Española de 1978 se sitúa en la cúspide de la pirámide normativa sobre la que descansa nuestro ordenamiento jurídico. De ahí que, aunque la mayor parte de los títulos de esta Biblioteca recogen nuestra mas Alta Norma, resulta coherente, util e incluso imprescindible disponer en la coleccion de un libro, manejable al maximo, que permita en cualquier momento consultar la Constitucion, profusamente anotada y comentada en todos sus preceptos.La incorporacion de la Ley Organica del Tribunal Constitucional obedece a dos razones: en primer lugar, a que el Tribunal Constitucional es el interprete supremo de la Constitucion, siendo por tanto logico, a fin de que el profesional y el estudiante dispongan de los instrumentos basicos de la constitucionalidad española, que figure la Ley reguladora del Alto Tribunal de Garantias; y, en segundo lugar, el trascendental significado que dicha Ley encierra en si misma.El volumen, por consiguiente, esta orientado hacia la via de la constitucionalidad, finalidad que se alcanza mediante la incorporacion de un exhaustivo registro de la jurisprudencia del Tribunal Constitucional, subdividido en tres indices:Cronologico.Concordado con los articulos de la Constitucion, y de Materias.Completa el volumen un extenso indice analitico general, que remite tanto a los articulo...

La bibliografia española en la materia objeto de este trabajo se caracteriza por su cantidad y calidad. Pero la razón de este trabajo responde a la exigencia de facilitar a los estudiantes de la UNED un breve y sencillo manual que les sirva para iniciarse en la practica del procedimiento, los actos y los recursos administrativos

La bibliografia española en la materia objeto de este trabajo se caracteriza por su cantidad y calidad. Pero la razón de este trabajo responde a la exigencia de facilitar a los estudiantes de la UNED un breve y sencillo manual que les sirva para iniciarse en la practica del procedimiento, los actos y los recursos administrativos

Desde que se aprobara el Tratado de la Unión Europea, en 1992, nos hemos ido habituando a la provisionalidad del Derecho de la Unión Europea, derivada de las continuas reformas de los tratados y de las sucesivas adhesiones de nuevos Estados a la Union que han modificado sucesivamente el Derecho originario. En la Union, comienza a convertirse en costumbre que antes de la entrada en vigor de un nuevo tratado de reforma de los anteriores tratados, o inmediatamente despues de la entrada en vigor de un nuevo tratado, se comience a modificar el nuevo tratado. Este ha sido el caso del Tratado de Lisboa cuya reforma se ha iniciado cuando todavia no habia transcurrido un año desde su entrada en vigor. Esta circunstancia, junto al torbellino de reformas que sufre el Derecho derivado ha convertido al Derecho de la Union en un subsector del Derecho de los Estados miembros y lo aleja cada vez mas de la concepcion tradicional del Derecho internacional dotado de estabilidad. Es legitimo preguntarse el sentido de dichas reformas, ¿acaso persiguen la ambicion de los fundadores de crear una federacion de estados europeos como destino final? Sin duda, en la Union se reconocen desde sus inicios los que pudieramos denominar indicios federalizantes. Instrumentos juridicos como el reglamento, o instituciones como el Banco Central Europeo, son propios de los estados federales. Pero, junto a elementos federalizantes se reconocen instituciones y tecnicas correspondientes a las organizaciones internacionales convencionales como, por ejemplo, el Consejo Europeo, o las resoluciones y otros actos atipicos dictados por el propio Consejo Europeo, por el Consejo de la Union, por la Comision Europea, o por el Parlamento Europeo. Lo supranacional y lo intergubernamental conviven desde los inicios de la construccion europea; asi como formas intermedias de ambas concepciones. Esto me ha determinado desde hace algun tiempo a referirme a la Union Europea como una organizacion intraestatal, una nueva especie de organizacion que seria la sintesis de las tendencias intergubernamentales y supranacionales que desde sus inicios conviven en la Union.

En este libro los autores realizan un estudio de la incidencia de las Administraciones públicas en la sociedad española a través de las distintas potestades y técnicas que se han puesto a su disposición. Se presenta una visión novedosa de la Parte especial del Derecho administrativo bajo la denominación Intervención de la Administración en la sociedad, que trataría de colaborar en la subsanación de la deficiencia que ha supuesto el incremento extraordinario de la intervención de las Administraciones públicas en la sociedad española como consecuencia de la Constitución Española de 1978 y que hace irreconocible el Derecho Administrativo anterior y posterior a la Norma Fundamental. El libro verifica y analiza la aplicación de las potestades y técnicas generales del Derecho administrativo en la sociedad, así como las innovaciones que tienen lugar como consecuencia de la necesidad de adaptación de dichas técnicas generales a los nuevos retos de la sociedad contemporánea. Como la extensión e intensidad del intervencionismo administrativo en la sociedad impide un análisis exhaustivo del mismo, los autores han elegido las manifestaciones más destacadas del incesante intervencionismo público, tomando como referencia sistemática la distribución de competencias administrativas entre los diferentes departamentos ministeriales existentes en la actualidad.

El régimen jurídico de los empleados públicos (antes y después del Estatuto Básico del Empleado Público), se integra por un conjunto abigarrado de normas legales reglamentarias, fruto de la diferente naturaleza de los numerosos títulos competenciales que operan sobre la función pública de los que son titulares del Estado y las Comunidades Autónomas, que otorgan a esta materia un alto grado de complejidad. El Estatuto Básico del Empleado contiene novedades notables, entre las que se puede destacar la evaluación del desempleo y el tratamiento de la negociación coletiva que culmina un poseso iniciado en 1987. La mas significativa, sin duda, es la de no haber afrontado ni la unificación ni la previsión futura de unificación de los regimenes jurídicos de los empleados públicos funcionarios y laborales consagrando una concepción dual de la función publica que, a buen seguro, traerá consecuencias desfavorables para el funcionamiento de las administraciones públicas a medio y largo plazo

El Derecho Administrativo de nuestro tiempo se caracterizará por su conversión en un Derecho al servicio de los ciudadanos que vaya más allá de las afirmaciones eufemísticas de los legisladores. No deja de ser curioso que entre las miles de leyes a las que calificamos de legislación administrativa sólo unas pocas estén dedicadas de modo principal a los derechos de los ciudadanos.

Este libro se adapta al Tratado de Lisboa y contiene además indicaciones sobre las correspondencias de dicho Tratado tanto con el Derecho de la Unión vigente con anterioridad como con el texto de la Constitución Europea. De este modo entendemos que se puede alcanzar una compresión más cabal del significado del Tratado de Lisboa. Es hora de que nuestra generación eleve la mirada sobre los intereses nacionales para ver el horizonte de Europa, como supieron hacer los grandes fundadores, Schuman, Monnet, Adenauer, De Gasperi, y otros tantos. Y, en consecuencia, animamos a los ciudadanos y a los líderes europeos a que lleven a cabo cuantos esfuerzos sean precisos para que no se detenga el proceso de construcción europea.