Cuantos críticos han tenido la fortuna de frecuentar la poesía de Fermín Heredero Salinero se han declarado unánimes en subrayar su carácter de experiencia creadora fundada en un componente clásico, con el que el autor rompe de continuo para obedecer a la llamada de un orden interior que resulta imprescindible para la verdad de su mundo poetico.Este nuevo libro de versos no desmiente este dualismo basilar en que hace su asiento el universo imaginativo herederiano; pero, en este caso, el poeta intenta forzarlo para dar desahogo a su vision critica del mundo, al par que se abre a una interrogacion de indole existencialista.
La silla de paja nos propone un viaje a la magia de las palabras y nos evoca la España rural de los años 50 y 60, vista por un muchacho de aquel momento, con la inocencia, la picardía y el realismo propios de su edad. Desde sus anécdotas, el lector se traslada y rememora ese mundo tan cercano en el tiempo y a la vez tan distinto al de hoy. Un mundo donde prevalecían la espontaneidad, la franqueza y el aprendizaje generacional, con el gozo del sosiego en la naturaleza, el trabajo en el campo, la charla y los juegos de temporada en la calle, la afectividad familiar y la convivencia, pero con los problemas del autoritarismo, las supersticiones, la pobreza y la emigración en busca del sustento. Podrían ser relatos contados alrededor de la llama del hogar, aunque la temática y la referencia al pasado se expresan literariamente con una técnica narrativa actual, que acoge en un amplio abanico desde el monólogo interior y el estilo indirecto libre a la interpolación de planos. Los distintos relatos se entrecruzan y unifican, desde la visión sincera y candorosa de su protagonista o testigo observador. Un libro que nos acerca a nuestras raíces, raíces que nunca debemos olvidar y que las generaciones nuevas deben conocer.