En esta obra han participado treinta y cinco especialistas europeos de quince países. Este primer volumen es un largo recorrido desde los primeros pasos del hombre, por un espacio aún inacabado, hasta el siglo de las Luces, en que se expande una civilizacion dominante.Durante la Prehistoria, las nociones de fronteras y de areas culturales son obviamente inadecuadas: las ciudades o imperios mediterraneos de la Antiguedad abarcan tan solo una escasa parte del continente, pero es posible vislumbrar las etapas de un poblamiento diversificado e incluso pueden medirse con bastante precision. Dicha constatacion de las diferencias induce a reflexionar acerca de la elasticidad y las capacidades de adaptacion de una demografia europea y a subrayar el caracter unificador de los valores definidos desde la alta Edad Media por una cultura cristiana, que rechaza ciertas practicas como la poligamia, el aborto, el infanticidio y que ensalza el matrimonio. Del siglo XVI al XVIII Europa conoce una relativa estabilidad con la aparicion del matrimonio tardio de las mujeres, lo que permite reducir la natalidad dentro de un contexto de alta mortalidad y lograr un equilibrio aproximativo entre recursos y poblacion.
En esta obra han participado treinta y cinco especialistas europeos de quince países. El primer volumen es un largo recorrido desde los primeros pasos del hombre, por un espacio aún inacabado, hasta el siglo de las Luces. El segundo evoca la transicion demografica de los siglos XVIII y XIX y este tercer volumen trata de nuestro mundo contemporaneo y de las novedades radicales que presenta.En 1900, dominadora, rebosante de hombres y de vitalidad, Europa lo espera todo del nuevo siglo. El hombre europeo esta por doquier, allende los mares, en tierras que ha conquistado y poblado, en sociedades que domina con autoridad. El porvenir es radiante incluso si muchos, demasiado pobres, tiene que expatriarse, lo que no impide que la poblacion del continente siga creciendo: jamas Europa habia acogido una proporcion tan grande de la humanidad. Pero tal soberbia choca con la realidad de las guerras, las matanzas y las revoluciones. De manera paralela, los avances tecnicos y los progresos medicos prosiguen. Muertes dadas por un lado, vidas salvadas por el otro: tiempos inciertos.
En esta obra han participado treinta cinco especialistas europeos de quince países. El primer volumen es un largo recorrido desde los primeros pasos del hombre hasta el siglo de las Luces, en que se expande una civilizacion dominante. Este segundo volumen evoca la transicion demografica de los siglos XVIII y XIX y el tercero trata de nuestro mundo contemporaneo y de las novedades radicales que presenta.De 1750 a 1914 la poblacion del Viejo Continente se multiplico por tres: en visperas de la Primera Guerra Mundial, un hombre de cada cuatro era europeo. Inicialmente se hablo de transicion demografica como si se tratase el paso de un estado estable a otro, pero la amplitud del acontecimiento y su caracter desestabilizador invitan a retener el concepto de revolucion demografica propuesto en 1934 por Adolphe Landry.