Despues de uno de los más reñidos debates de las nueve convocatorias del Premio La sonrisa vertical, el jurado se decidió finalmente, con gran satisfacción, por El bajel de las vaginas voraginosas, de Josep Bras, escrito originalmente en catalan. De hecho, tal y como reza el acta de concesion de este noveno premio, el jurado se dejo seducir "por la indudable maestria con la que se traman las multiples historias, la diabolica precision del lenguaje y la presencia sutil de un humor que en un momento alguno destiñe la eficacia erotica de la narracion". El bajel de las vaginas voraginosas es un juguetea; un calidoscopio literario plagado de imaginacion, a traves del cual el lector, la lectora, o mejor los dos juntos, tienen el privilegio de espiar maridos cornudos, malogrados gemelos, loros enamorados, viudas maternales o voraginosas reinas del cruel planeta Drakkar. Proponemos al lector sentirse voyeur por un instante. Arrellanarse en un confortable sillon y utilizar este libro como prismaticos. Seguro que descubrira que los vecinos de enfrente protagonizan experiencias hasta ahora insospechadas. Sobre todo si transcurren en una ciudad tan excitante, tan delirante, tan sugerente como la Xaitania de Josep Br
Despues de uno de los más reñidos debates de las nueve convocatorias del Premio La sonrisa vertical, el jurado se decidió finalmente, con gran satisfacción, por El bajel de las vaginas voraginosas, de Josep Bras, escrito originalmente en catalan. De hecho, tal y como reza el acta de concesion de este noveno premio, el jurado se dejo seducir "por la indudable maestria con la que se traman las multiples historias, la diabolica precision del lenguaje y la presencia sutil de un humor que en un momento alguno destiñe la eficacia erotica de la narracion". El bajel de las vaginas voraginosas es un juguetea; un calidoscopio literario plagado de imaginacion, a traves del cual el lector, la lectora, o mejor los dos juntos, tienen el privilegio de espiar maridos cornudos, malogrados gemelos, loros enamorados, viudas maternales o voraginosas reinas del cruel planeta Drakkar. Proponemos al lector sentirse voyeur por un instante. Arrellanarse en un confortable sillon y utilizar este libro como prismaticos. Seguro que descubrira que los vecinos de enfrente protagonizan experiencias hasta ahora insospechadas. Sobre todo si transcurren en una ciudad tan excitante, tan delirante, tan sugerente como la Xaitania de Josep Br