Leopoldo María Panero, página 2 de 5

"Yo soy el paraíso de todos los fracasados de España", confiesa Leopoldo María Panero en este libro. Las cartas que se escribieron Panero y el artista asturiano Diego Medrano son las páginas de Los héroes inútiles, seres que no sirven para la vida sino para el arte. Un Panero lúcido y punzante que sólo ha conocido el infierno delira y sueña buscando la esperanza en las paredes del psiquiátrico; Diego Medrano nos muestra la bohemia Vetusta, con personajes tiernos y postergados como Coque Ceramesí, que le da un consejo: "No olvides que la sonrisa cuenta menos que la electricidad y da más luz". Las cartas del "novísimo" madrileño están repletas de iluminaciones y citas, de homenajes y críticas, amores, abismos, persecuciones, anticristos,; en las de Diego brillan insólitos ensayos sobre literatura, tabernas, pintura, diosas, sirenas, prostitutas... "abriendo la puerta de la realidad con la fantasía." Panero y Medrano siguen la senda epistolar iniciada por los pensadores griegos. En los tiempos de las nuevas tecnologías y los viejos convencionalismos, reivindican la artesanía de la carta con el provocante lenguaje de dos héroes inútiles.Prologo LuisAntonio de Villena

Papá, dame la meno que tengo miedo es la última creación de Leopoldo María Panero y, hasta la fecha, su libro en prosa más desgarrado e íntimo.

La obra de Leopoldo M.ª Panero (Madrid, 1948), reconocida por casi todos como la más radical y rigurosa de su generación, ofrece con Contra España y otros poemas no de amor una nueva muestra de la fuerza que la caracteriza. Sus variados motivos -la monarquia, el 23 F, ETA, la religion, algunos topicos tradicionales- remiten siempre a un entramado en que la violencia, el sexo y el excremento son los nombres del debate existencial; de aquel debate que se sostiene en un limite, o del otro lado: el cadaver del alma que finge un gran poema.La densidad de las imagenes, oscilantes siempre del simbolismo al expresionismo, junto al cuidado de la sintaxis, se articula en el intenso y personal trabajo ritmico que se convierte en una de las claves del libro, pues Panero aporta en el elementos renovadores dentro de su trayectoria.

Es el silencio la única flor que horada la tumba y busca la pérdida y anhela el pasado parecido a una oruga como hormiga pisoteada como flor bajo el zapato como hombre barrido por el viento.

Catalogado como «enfant terrible» o, simplemente, «loco», Leopoldo María Panero (Madrid, 1948) es autor de la obra poética más radical y singular de la poesía española de los últimos tiempos. Pese a

“...Puede decirse que fue el miedo el único sentimiento que dio algo de vida a mi alma, y el único que siempre me llegaron a inspirar los seres humanos...”, confiesa uno de los atormentados protagoni

Cada conciencia busca la muerte de la otra" Del combate de conciencia nada queda en el suelo Salvo la sombra de una sombra El miedo al vacío y el miedo a la verdad El "horror vacui" en un rostro El género humano no soporta demasiada realidad Y sólo la desesperación es una flor La fruta dorada del silencio El fruto de la Nada

Desnudo frente a los arcontes ignorando el principio/ en busca de mi rostro comido por los rostros/ y vertiendo mis lágrimas en un vaso de alcohol/ donde no está el hombre/ Tenso mi piel como un tambor frente a los astros/ señalando el camino oscuro de las cicatrices/ como un juego antiguo/ en que del pasado el fuego.

Catalogado como «enfant terrible» o simplemente «loco», Leopoldo María Panero (Madrid, 1948) es autor de la obra poética más radical y singular de la poesía española de los últimos tiempos y sigue siendo el último tabú de su generación, un autor condenado a la marginalidad y el escándalo, recluido la mayor parte de su vida en sanatorios psiquiátricos. Presentación del Superhombre es, tras Tensó, escrito junto con el poeta italiano Claudio Rizzo en 1998, la segunda obra poética de L.M. Panero en colaboración, una obra realizada a medias, como una composición para cuatro manos, en la cual Panero ha dirigido y supervisado cada uno de los versos, y así su mano se evidencia en cada poema. L.M. Panero define así al coautor de esta obra: Félix Caballero es un ser humano de los que faltan, cuyo vicio es escribir bien, sin la retórica de la envidia y del fracaso, que son las únicas voces que existen en el mundo esquizofrénico del «parnasillo literario circense»; es un caballero, y un caballero no es moderno ni antiguo, es de todos los tiempos, es inactual. Así, nuestra Presentación del Superhombre llora y celebra la lágrima, clamando por la belleza perdida.

Esta colección de poemas en verso y en prosa, dividida en tres libros hermanos es, ante todo, un estudio de las posibilidades técnicas de la escritura a dos manos; del verso que interpela, no al lector, sino al amigo, en la sincronía de dos asesinos que se conjuran para el inmolamiento blanco del poema, con la técnica de la fría premeditación, y de la aun más fría soledad de la excelencia.

Como señala Tua Blesa en el Epílogo del presente libro, Los poemas de Teoría del miedo , como el conjunto de la escritura de Leopoldo María Panero, son un nuevo viaje a lo oscuro, una vuelta a indagar otra vez en el vacio en un intento de dar nombre a aquello que, precisamente, no puede tenerlo, al igual que sucede con la belleza, esa aspiracion sin nombre, de ahi que vacio y belleza (la belleza es absurdo escribe el poeta en la Introduccion) resulten ser equivalentes, cuando no dos caras de un mismo y unico rostro, por lo demas, borrado. Siendo asi, ante la incapacidad, o imposibilidad, de nombrar aquello que imanta a la escritura con un poder supremo, irresistible, al poeta no le queda sino arriesgar, ninguna otra salida que el riesgo de un discurso que se dice sin que sea dicho para nadie, dicho por nada, que se dice, en ultimo extremo, sin decidirse. A destacar, en esta segunda edicion, los treinta y cuatro nuevos poemas con los que el autor ha querido enriquecerla.

Como explica en su prólogo Leopoldo María Panero, "la tensó es un combate dialéctico, un trobaire entre dos", es decir, un poema colectivo de origen provenzal, como lo es entre los japoneses la renga y entre los chinos la lien-tsu. De la colaboracion ente dos poetas, Rizzo y Panero, ha nacido este poema unitario en que ambos autores mueren como individualidades para dar nacimiento a una nueva voz, la de quien habla en Tenso, que sin ser ninguno de los dos es los dos a la vez, al tiempo que alguien o algo nuevo, el autor de un texto que ninguno de ellos por separado podria considerar unicamente suyo.

En abril de 1998, Michi Panero me llamó para que fuera a verle al apartamento que tenía alquilado en la calle de Juan Bravo. Al final de aquella velada, sacó un montón de carpetas, diez o doce, de diferentes tamaños y colores: eran el tesoro maldito de los Panero. "Haz lo que quieras con ellas", me dijo, "pero llévatelas de aquí". Yo tenía 22 años por aquel entonces y decidí guardarlas con mucho cuidado, pensando que algún día tendría el ánimo y la capacidad para abrirlas de verdad. JAVIER MENDOZA