En 1902, Antonio Gutiérrez emprende el regreso a la Estancia do Brejo, en Río Grande, aquella en la que su padre Matías pasó parte de su infancia y juventud, y en la que tuvieron lugar diversos acontecimientos protagonizados por las mujeres de su familia. El regreso de Antonio a este remoto lugar en medio de la pampa estará acompañado por una revisión de la historia familiar, en la que van apareciendo los distintos personajes que desempeñaron un papel durante los últimos sesenta años: Matías Gutiérrez, el hijo de Mariana, hija de Bento Gonçalves, que participa en la guerra contra el Paraguay (1864-1870); Manuela, la hermana de Mariana, que escribe en sus cuadernos un diario; y Ana, que construye un faro a la orilla de la laguna de los Patos. Asimismo, será la ocasión para recorrer la compleja historia del país durante este período, llena de eventos determinantes para el presente de Antonio. Se trata de una gran saga familiar, al estilo de algunas novelas de Isabel Allende, que continúa la historia iniciada en La casa de las siete mujeres (Ediciones B, 2004) El período en que se desarrolla la trama, Brasil entre 1847 y 1903, resulta muy atractivo debido a diversos acontecimientos que modificaron la vida pública y política del país. Entre otros la revolución farroupilha, las campañas militares contra Uruguay y la guerra con Paraguay.
Augusto Seara, un marchante de São Paulo, recibe el encargo de recuperar y poner a la venta una serie de cuadros del pintor Marco Belluci, que se suicidó veinte años atrás. Cuando desembala el primer cuadro, descubre un texto oculto en su parte posterior. En realidad, cada lienzo esconde un texto del artista. Belluci cuenta el amor que sentía hacia Amapola; un amor en apariencia feliz, pero que encubría un doloroso secreto.
El 19 de septiembre de 1835 estalla la Revolución Farroupilha en el continente de Sáo Pedro do Rio Grande. Los revolucionarios. Liderados por Bento Gonçalvez da Silva, exigen la deposición inmediata del presidente de la provincia y, nuevas medidas comerciales y económicas.
Brasil, 1978. Augusto Seara, un marchante de arte de Sao paulo, recibe el encargo de recuperar y poner a la venta una seire de cuadros. El autor de los mismos, el artista Marco Belluci, se suicidó veinte años atrás y por deseo de su viuda, Amapola su obra quedó almacenada durante todo ese tiempo en la casa de campo en la que vivieron. Augusto viaja hasta la remota hacienda para organizar el traslado de los cuadros.