Introducción. I. Un vecino más en la aldea de Aseng-Bede. La fundación de la misión de Nsola. Para empezar, dos asuntos de brujería. Aseng-Bede. Christine, la segunda esposa. El vecindario de Aseng-Bede. Mi primera esposa, Julienne. -Hijo de los evuzok-. Los limites de la etnografia participativa. II. De una aldea a otra. Paseando por las aldeas vecinas. Las reformas liturgicas. Las otras aldeas. Los informantes del etnografo. Un instrumento indispensable: la lengua. Yusufaki. III. Estampas misioneras. Primera estampa: el pan nuestro de cada dia. Segunda estampa: la lucha contra la poligamia. Tercera estampa: el precio de la salvacion eterna. Cuarta estampa: una pesca milagrosa en aguas coloniales. IV. El estudio de la -religion- evuzok. A la busca de la -fuerza vital- de los evuzok (una pista falsa). Dos categorias locales fundamentales (rumores y acusaciones). Dos asuntos relacionados con el evu y el kong (silencios y palabras cazadas al vuelo). Los grandes acontecimientos (un hecho social [casi] total). La literatura oral (atajos y rodeos). Los origenes del evu (mitos y leyendas). Los representantes del orden diurno (conversaciones orientadas). Datos y analisis (al aprendizaje del estructuralismo). El mundo de la noche (una pieza importante del sistema). La imagen del -brujo- evuzok. Un mundo al reves (del mundo diurno al mundo nocturno). El kong (una nueva manera de concebir la brujeria). ¿Podemos hablar de religion V. El descubrimiento de otra medicina. Un tema de investigacion complejo. Las nociones de salud y de enfermedad. La pluralidad de sistemas medicos (una sintesis ejemplar).
En 1961 Lluís Mallart marchó al Camerún como misionero. El contacto cotidiano con una realidad cultural distinta, en plena crisis del sistema colonial con la proclamación de las independencias africanas, llevo al autor a reflexionar sobre el sentido de su mision. Poco a poco, se fue convenciendo de que debia ser infiel a su mision y se convirtio en antropologo. aSoy hijo de los Evuzok no es un tratado de Antropologia. Es una iniciacion academica -pero no por ello menos rigurosa- para descubrirla y practicarla, que nos recuerda cuan cerca esta de nosotros el continente africano y cuan lejos esta aun de los departamentos de Antropologia de nuestras universidades. A finales de 2006 Lluis Mallart realizo un corto viaje al Camerun para presentar sus dos hijos a los Evuzok que los reconocieron como sus "nietos". La presente edicion concluye con un epilogo escrito por Myriam Mallart en el que nos transmite la emocion de descubrir un mundo a la vez familiar y lejano.