'Lo anticipa el poeta Emilio Adolfo Westphalen, la poesía es un proceso repentino, un encuentro y movimiento de palabras hacia nuevos lugares: un enjambre. De ahí que este libro de Marcos Canteli se nos ofrezca como una indagación, un camino sin estrategias, como 'una mordedura que enciende el abismo', en palabras del propio autor. Las muescas, poemas, de esa mordedura están moduladas por la escasez y el silencio, sin llegar a hacer de ambos ni desparpajo ni retórica. Los lectores, con resignación, descubrimos a menudo el género poético como un protocolo. Enjambre se desmarca de dicha convención'. FERNANDO MENÉNDEZ
Los poemas de su sombrío discurren y ocurren entre dos impulsos de escritura y conflicto latente, que el autor vuelve explícito en cada nueva reunión de palabras: por una parte, organizan la memoria de un relato existencial; por otra, despliegan el espacio de una poética desde el que se propone una reflexión sobre el lenguaje y su relación con el mundo.
Lo que no poseemos va a durar la bañera sobre la hierba el abrevadero al fondo? moho de los ojos la depresión musical? que no existe ni tus pétalos abiertos pero en otro mundo sí la lámina que escribo en la disolución y que al volver a casa la casa ya no está la casa la casa que esencialmente no tenemos los ojos claros su propio aislante me dicen muere el canto el ojo aquí de mañana aquel parche pájaros maderas crujientes aquí no era ni es vestigio porque viene? largos de agua árboles escritos a su calor. MARCOS CANTELI
Flujo el estar ahí de la poesía donde Marcos Canteli inscribe momentáneamente lo suyo, su voy y su voz. El antiguo ritual que ya no se llama así obliga a un proceder relativo, inestable, mimético del cruce de las posibles vias de detencion del movimiento en su momento privilegiado, poema, que es olvido y memoria de un propicio linaje. En catalogo de incesantes, la singularidad de la escritura Canteli, cantera de arenisca, racimo de granos ceñidos al texto por una ilusion de contiguidad que solo la extrema tension permite, se aleja tanto de lo poetico que lo revela en su profunda extrañeza: la operacion poetica es rara, rara la palabra, raro el decir y el no decir que se le extraña, constitucion Canteli de presencia, estar ineludible en la palabra de la lengua y en el silencio de la lengua. EDUARDO MILAN