El marroquí Mohámmed Bennís es, sin lugar a dudas, representante destacado de una poesía árabe viva, actual, radicalmente contemporánea, de una escritura que busca sin descanso la raíz de la palabra poetica: cada libro que publica es un nuevo catalogo de poesia experimental, un abanico de tentativas meditadas y siempre abiertas. En esta misma linea, Bennis se propone en Libro del amor restaurar la escritura del Collar mediante un arduo y arriesgado trabajo poetico de taracea, de bricolaje. En sus poemas glosa o transcribe diversos parrafos del Collar en una meditada seleccion de las maneras de amor, de los perfiles del deseo registrados por Ben Hazm, y los mezcla o yuxtapone a sus propios versos que reclaman la libertad erotica, la pasion carnal que por el intrincado laberinto de los sentidos, de la emocion, del sentimiento, busca siempre otra pasion semejante; que reivindican los cuerpos desnudos que se anegan mutuamente para salvarse de la nada, para librarse de la muerte.
Entre la voz sola que se pierde en el silencio y la embriaguez de la Palabra encarnada, entre la oscuridad de la noche y las primeras luces del alba, entre copas y tabernas metafóricas y reales se mueve este libro, Vino, celebracion escandida y escanciada de ese licor alegre o triste, generoso siempre, que con el trabajo de sus Manos el hombre hace brotar de los racimos de uva, de la vid que alza de la tierra su tronco sarmentoso. Celebracion hermetica tambien, en casi todos los significados del adjetivo.
EspacioDe una mancha surge la escrituraDel ala de la muerteDel fondode un extravíoDe un vacío soberanoque es de luz transido habitaDe la antigenealogíaHoy entre nosotros una invocación de tatuajesyci