Diccionario provisional de pérdidas es sin duda el ensayo más ambicioso de Miguel Albero. Estamos ante un diccionario que se lee, no se consulta, como nos informa el autor en el prólogo, donde además nos propone una lectura lineal del mismo o, como el lo llama, marcarse un Rayuela, yendo de una entrada a otra en funcion de su afinidad semantica.Desde la primera entrada (A. Perdida de cuanto sigue) a la ultima (UBICUIDAD. Perdida de la localizacion), el lector asiste a un festival de perdidas, de las mas evidentes (AMNESIA. Perdida de la memoria) a las mas sutiles (CASI. Perdida del todo), de las mas tremendas (APOCALIPSIS. Perdida del futuro) a las mas surreales (PERDIDA. Perdida de la tilde de perdida), de los inexistentes PARAISOS PERDIDOS al maravillosoSALON DE LOS PASOS PERDIDOS. Pierdase pues el lector en este libro, no le defraudara.