Con Aixa, el cielo de Pandora, la literatura de Bouissef Rekab se podría situar en franco diálogo intertextual con las reproducciones fotográficas eróticas y traumáticas de Romain Slocombe y con el Órealismo sucio" tanto de su compatriota Mohamed Chukri como del cubano Pedro Juan Gutierrez. Aixa tiene mucho de leyenda urbana, de escatología y un dejo de representación metrosexual retro (el tiempo narrativo abarca el Protectorado Español). Por encima de todo juicio de valor estetico-literario, la construcción del personaje-prostituta Aixa bebe de las pulsiones eróticas de la Lolita de Nabokov para caer En brazos de la mujer madura de Stephen Vizinczey, con todo lo que esta tiene de iniciación al sexo de hombres jóvenes.