Sinopsis de CARTAS A STALIN: MIJAIL BULGAKOV Y EVGENI ZAMIATIN
Recopilación de cartas que ambos autores rusos dirigieron a Stalin pensando, ingenuamente, que este puede liberarlos de lo que constituye la peor de las condenas para un escritor: el silencio. En ellas Bulgákov inspira ternura al revelar que lleva la cuenta de las críticas publicadas en Rusia sobre su trabajo, laudatorias (apenas tres) y hostiles e injuriosas (doscientas noventa y ocho). Zamiatín recuerda que su obra Atila fue sometida al arbitrio de los críticos más insólitos: “Representantes de dieciocho fábricas de Leningrado”. Tampoco les preocupa su supervivencia. “Los escritores rusos están acostumbrados a pasar hambre”, dice Zamiatin. Sin embargo, el dolor de no poder comunicarse con su público es insufrible. “Para mí –dice Bulgákov-, el no poder escribir es lo mismo que ser enterrado vivo”. El silencio estruendoso del poder va empequeñeciendo a Bulgákov, que se humilla hasta el límite, llegando a solicitar que se lo acepte como tramoyista. Zamiatin se exilia a París. Bulgákov muere en Rusia sin haber logrado dar salida a sus obras. Hasta veintiséis años después, no se publicó su obra maestra.
Ficha técnica
Editorial: Veintisiete Letras
ISBN: 9788492720026
Idioma: Castellano
Número de páginas: 124
Tiempo de lectura:
2h 52m
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 19/01/2010
Año de edición: 2009
Plaza de edición: Madrid
Alto: 21.0 cm
Ancho: 13.0 cm
Especificaciones del producto
Escrito por Mijaíl Bulgákov
Kiev, (1891-1940). Mijàil Bulgakov, novelista y dramaturgo, estudió Medicina, pero renunció a esa profesión en favor de la creación literaria. Sus primeras obras son narraciones satíricas y comedias. Tuvo que enfrentarse a la crítica oficial por su retrato favorable de un grupo de oficiales blancos antibolcheviques durante la guerra civil y la falta de un héroe comunista. Aunque las obras de Bulgakov disfrutaban de gran popularidad, las autoridades le prohibieron publicar a partir de 1930 pues encontraban inaceptable su sátira de las costumbres soviéticas. La fama de Bulgakov no quedó establecida hasta años después de su muerte, cuando sus novelas, obras de teatro y su biografía Vida del señor Molière empezaron a publicarse a partir de 1962.