La contratación y los actos jurídicos en general, realizados a través de la electrónica, la informática y la telemática, determinan el nacimiento de derechos y obligaciones tanto personales como patrimoniales de una determinada forma y manera, que requieren la adecuada atención del jurista en orden a su regulación, control y previsión de sus consecuencias. Legal y jurisprudencialmente se ha dado entrada al documento electrónico otorgándole validez, simpre que sea auténtico y haya sido obtenido lícitamente.