Un escritor que ha perdido la inspiración. Una disputa con un colega. Una noche de sueños y pesadillas.
Todo se combina para que el protagonista entre en un mundo extraño donde unos seres maléficos de tez blanca, casi casi talco, estén a punto de acabar con toda la literatura escrita hasta entonces desde los albores de los tiempos.
Pronto descubrirá el mundo de Olvidia y lo mucho que está implicado en esta guerra sin cuartel contra la ignorancia. Mundos que mueren por la desidia del protagonista, por su pereza en seguir escribiendo. ¿Qué le ocurrió para que dejara de hacerlo?
Sólo si él mismo descubre la respuesta podrá salvar a Olvidia y a otros lugares mágicos de la devastación provocada por esos seres y por el más terrorífico de ellos: el señor Blum.