En febrero de 1939, las bombas alemanas e italianas arrecian sobre Figueras. La pintora Diana Richardson es asesinada en su domicilio, delante de su último óleo. Los presuntos culpables camuflan su cadáver y el lienzo en la caravana de evacuación del Tesoro Artístico Español con destino a Ginebra. Carla, hija de la víctima, los persigue hasta las proximidades de Perpiñán. Allí conoce al joven detective Leo Ventura, y ambos acaban uniendo sus fuerzas en una misión que los conducirá a las costas de Normandía.