El recorrido de este libro en su conjunto se tiene de manera muy fluida: argumentaciones breves, aforismos, páginas poéticas, documentos-citas sustituyen, por pequeñas pinceladas, una argumentación lineal clasica , una suerte de retorica poetico-conceptual progresando por espirales (segun una imagen que Maria Noel Lapoujade usa seguido)...La riqueza de la obra de Vermeer hace posible la integracion total: por una parte, del espectro completo de las formas de la mirada (de la ceguera a la vision mistica) y, por otra, de la pluralidad de las formas de lo imaginario pictorico (de la ilusion perspectivista a la simbolica mistica), confluyendo al final en la perla.Asi, el libro se revela como original, brillante.