Este libro es fruto de las más de treinta entrevistas que Nicky Eltz realizó a María Simma a lo largo de cinco años, centradas en sus experiencias y en sus revelaciones privadas. Desde hace bastante tiempo, Maria es visitada con frecuencia por las benditas animas del purgatorio. Cada vez que ocurre esto, su reaccion es siempre la misma; les pregunta: "¿Que necesitas de mi?". Y estas buenas amigas lo que piden son oraciones y que no se les olvide, pues su tiempo de merecer ya ha pasado.Aunque al tratarse de una revelacion privada no es necesario creer en lo que aqui se cuenta, cualquiera que lea este libro se dara cuenta del amor de Dios que se trasluce en las respuestas de Maria. Y como resultado, el lector se sentira urgido a una mayor devocion a las benditas animas del purgatorio, a una mayor veneracion al Santisimo Sacramento y a aprovechar el tiempo que pasamos en la tierra para acercarnos mas a Dios y a la Virgen.Como dice en el prologo Maria Vallejo-Nagera, autora de "Entre el cielo y la tierra. Historias curiosas sobre el purgatorio": No se puede ni imaginar el pedazo de gema cuasi-periodistica que tiene en este momento entre las manos, querido lector. Si lo supiera se saltaria mi prologo de sopeton, pues nada de lo que yo pueda adelantarle puede reflejar la aventura espiritual y el descubrimiento sobrenatural que le espera entre las lineas de este magnifico ensayo sobre la realidad de la existencia del purgatorio.Maria Simma (1915-2004) nacio y vivio en Sonntag (Voralberg), Austria. Es un alma mistica favorecida con el carisma de recibir mensajes de las almas del purgatorio, a quienes ha consagrado su vida desde joven. Siempre de acuerdo con su obispo y su director espiritual, ha realizado un autentico apostolado, tanto con sus conferencias como con sus conversaciones con las numerosas personas que iban a visitarla o le escribian.
María Simma (1915-2004) nació y vivió en Sonntag (Voralberg), Austria. Es un alma mística
favorecida con el carisma de recibir mensajes de las almas del purgatorio, a quienes ha
consagrado su vida de