En 1950 China invadió Tíbet. Bajo el gobierno de Mao, la soberanía de Tíbet fue sistemáticamente destruida: se quemaron libros, se alteró la historia, se persiguieron las órdenes religiosas, se aniquilo una buena parte de una cultura milenaria y el espiritu de un pueblo pacifico.En 1995 Palden Gyatso, junto a otros miles de monjes, fue arrestado, hecho prisionero e internado en un campo de trabajo chino. Alli pasaria los treinta y tres años siguientes de su vida siendo interrogado y maltratado.Tras ser liberado en 1992, logro escapar a India llevando consigo los instrumentos con los que habia sido torturado. Desde entonces, convertido en portavoz de un pueblo que sigue luchando pacificamente por alcanzar la libertad, Palden Gyatso se ha dedicado a denunciar el genocidio cultural tibetano a manos de las autoridades chinas.