A la mayoría de los poetas, como a la mayoría de las personas, les gustan los perros. Y la figura del perro en la poesía es casi tan antigua como la poesía misma, tal vez porque esta criatura presenta una inteligencia o un entendimiento que lo hace ser especial dentro del reino animal, y casi siempre excepcional en su particular relacion con los seres humanos. De ahi que no hayan sido pocos los poetas y los escritores que a lo largo de la historia han mostrado un intenso amor por los perros, y no pocos tambien los que han llevado ese amor a sus creaciones poeticas o narrativas. En esta antologia el lector encontrara un florilegio de poemas de autores contemporaneos en los que seguro que no pasara pagina sin sentir que algo dentro de si se estremece, se alegra, se sorprende, se angustia o se deleita.
Desde el principio de los tiempos el mar ha fascinado al ser humano ya fuese como promesa de aventura, puerto de llegada o de huída, frontera por donde aparecen los barcos de guerra, como entretenimiento o fuente de comida, como anhelo o paisaje cotidiano, y tambien como un espejo donde contemplar la belleza. No se conoce de un solo pueblo ni de un siglo que no le haya escrito versos al mar. Esta antologia propone tres miradas europeas al mar, tres modulaciones liricas ligeramente distintas decididas a seducir o tomar por asalto nuestra imaginacion. La primera de estas tradiciones es la inglesa, en sus poemas se aprecia que el mar rodea por completo la isla, y que todas sus fronteras son liquidas: el mar es tan frecuente que toda clase de asuntos se relacionan con el. Para la tradicion francesa, la segunda que aborda el libro, el mar tiene algo de presencia casi espiritual, confrontada a los negocios del dia a dia. En la tercera tradicion, la española, el mar sabe a rebeldia. Las tres secuencias (la inglesa, la francesa y la española) estan organizadas cronologicamente. El lector encontrara aqui nombres tan principales como Lorca, Rosalia de Castro o Espronceda; Baudelaire, Hugo o Rimbaud; Keats, Byron o Edgar Allan Poe. Que con todas sus diferencias demuestran que la fascin