Este trabajo es un ensayo sobre lógica representacional, así como una invitación a mirar y a ver la obra pictórica de Egon Schiele desde una perspectiva especial, que se sitúa en el entramado de las relaciones filosófico-artísticas característico de la viene finisecular, al lado de la poesía de Georg Trakl o de las composiciones de Arnold Schönberg.