La eficacia de cualquier equipo de ventas depende en gran medida de la calidad de la formación recibida. Lo que hace un buen formador es inspirar y motivar a quienes está formando. En última instancia, si el programa de formación es ameno y edificante estará asegurado el éxito del equipo. Este nuevo libro ayudará a conseguir dicho éxito, proporcionando una guía completa a los directores y formadores de ventas, que hasta ahora disponían de un material escaso y poco fiable de donde elegir y que a menudo tenían que aprender de sus propios errores.